Tramacastilla
Tramacastilla de Tena es una localidad de la provincia de Huesca ubicada en los Pirineos sobre los 1224 metros de altitud, en un entorno bastante privilegiado con la peña Telera, peña Blanca y el pantano Búbal presidiendo el valle. Tramacastilla de Tena está rodeada de praderas y mucho bosque de pinar y robledal, su el casco urbano está formado por edificaciones en perfecto estado, se destaca por sus casonas solariegas de noble porte, con balcones y muros cubiertos de flores, también se observan bordas y pajares para aquellos viajeros que gustan de visitar pueblos con encanto rural.
El municipio pertenece a la provincia de Huesca en la comarca del Alto Gállego, durante un tiempo integró el histórico quiñón de La Partacua junto con Sandiniés, Escarrilla, Piedrafita, Búbal y Saqués, actualmente pertenece al término municipal de Sallent de Gállego.
Qué ver o hacer en Tramacastilla de Tena
La localidad se encuentra dentro del incomparable marco del Valle de Tena, que es uno de los más visitados de los Pirineos oscenses. En su entramado urbano se encuentra la iglesia románica del siglo XII dedicada a San Martín, tiene en su interior un hermoso retablo renacentista en honor a San Miguel. La iglesia original fue ampliada a finales del siglo XVI, su primitiva cabecera ahora es uno de los brazos de la moderna que también presenta cruz latina.
Otra importante construcción religiosa que se encuentra en Tramacastilla de Tena es la ermita de San Juan Bautista de finales del siglo XVII, tiene planta rectangular de unos 10 por 5 metros. En su interior acoge un retablo barroco de principios del siglo XVIII y relieves de San Juan, San Ramón y San Antonio de Padua.
De la localidad oscense también hay que destacar sus festividades mayores organizadas hacia el primer fin de semana de octubre, están dedicadas a Nuestra Señora del Rosario. En Tramacastilla de Tena también se conservan tradiciones como la «ronda», en la que se recorre todas las casas del pueblo, mientras los mozos bailan el típico «paloteo». Durante ellas es típico echar brindis y disfrutar del jamón y vino de la tierra. Otra delicia típica que se debe disfrutar en este lugar son las famosas migas de pastor.
La localidad también es popular por sus bellos paisajes, que hipnotizan al turista tanto en verano como en invierno, muy cerca está la estación de esquí de Formigal que es una de las más visitadas en la provincia de Huesca. El municipio también cuenta con un espectacular mirador subiendo por los lados de la iglesia, es un rincón excelente para disfrutar de los bellos atardeceres del Valle de Tena.
Por último, no hay que olvidar realizar el paseo en el tren turístico que acerca a lugares muy emblemáticos de los Pirineos oscenses como son; el Ibón de Tramacastilla, Peña Telera, barranco del Gorgol y diversos sitios más. El paseo dura unas dos horas y media y solo está disponible entre junio y agosto.